He's lying, you're crying. There's nothing left to salvage.
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Hemos sobrevivido, aunque no sé bien a qué.
Gracias a pin y pon quedan dos años y por ahora lo único que tengo que decidir es como mandarte a la mierda. ¿Cómo puede ser que tú seas tan jodidamente estúpido y que yo este tan ciega? Te echo de menos, a tí, a tus estupideces, tus bromas, tu forma de picarme tan adorablemente. ¿Qué habeis hecho con él y por qué no me lo devolveis? Cabrones.
martes, 28 de septiembre de 2010
Nunca digas nunca, pero nada es para siempre
Escribía con números (combinaciones del 1 al 27, para ser exactos), hablaba en restas, soñaba en sumas, podría decirse que vivía en una ecuación. Una ecuación igualada a cero, o quizás no, porque nunca había probado a pasar al otro lado. Pensaba que podría incomodar al cero con sus estúpidas preguntas. ¿Cómo te vas a quejar de algo a un cero? Puede que por eso nunca hubiese cruzado ni llamado a su puerta. Pero ese día había algo distinto. El cielo seguía siendo azul, la gente igual de falsa y superficial, incluso su planeta seguía dando vueltas alrededor de la misma estrella socarrante.
Pero no, no era eso. Alguien le miraba, por primera vez desde que se convirtió en aquella niña chiquitita, alguien se estaba fijando en ella. Y pasaron días, semanas, incluso meses, en los que la minúscula niña se empeñó en entenderse con aquel ser de enormes incisivos. A decir verdad, olvidó por completo por qué se había convertido en aquella cosita de tamaño reducido, un par de palabras bonitas, varios apelativos cariñosos y todo lo que había reunido en su diminuta cabeza desapareció. Él pasó a ocupar la gran mayoría de ese espacio y por tanto de su tiempo. Cuánto más pensaba en él más grande se hacía, y llegó el día en el que la pequeña niña volvió a ser normal. Dejó de ser chiquitita y de llamar su atención. Olvidó como ser especial, para terminar siendo rara. Dejó de gustarle. ¿Lo peor de todo? Ya le había enseñado a usar su alfabeto.
Pequeña bocazas.
viernes, 24 de septiembre de 2010
Pon carita de pena que ya sabes que haré todo lo que tú quieras
No hay nada más reconfortante que probarse ropa. Ropa ancha, ropa enorme con la que dormir se convierta en un juego, ropa blanca, ropa negra, ropa que sobra en tantos momentos. Me he ido sola a comprar, no es la primera vez que lo hago y aunque pueda parecer aburrido realmente no lo es. Elegir por mi misma, morderme las uñas, escribir para no pensar y pensar en qué escribir. Corto las etiquetas de todas y cada una de las prendas que compro, da igual si no me las llego a poner o las desgasto de tanto usarlas, las abandono en un cajón, las presto, las pierdo o las rompo. Las rayas, el negro y el azul. Blanco nunca sobra, marrón siempre falta. Ni naranja ni rojo ni amarillo,y menos juntos. Las x con las l, las s de vuelta a su percha, y esperar, esperar y esperar. Probadores, cajas, un sms que te diga que tú eres su princesa. Llego a las asitas del bus, me dejo las brazos y a poco los dientes todos los días a las siete y medía en cualquier veintinueve a reventar, pero llego. Me da que eso es lo único que puedo celebrar hoy. La vida no es justa, pero siempre me quedarán mis camisetas y mi entrada número cien.
jueves, 23 de septiembre de 2010
Improvisemos un guión definitivo que no tengamos más remedio que olvidar
Extraña, calurosa y oficialmente se ha acabado el verano. He de decir que me alegro, no verano, no calor, sí frío. Simple, sencillo. Tanto como que hoy es veintitrés de septiembre. Supongo que para la gran mayoría de vosotros será sólo un jueves más, la víspera de una buena noche, un viaje o simplemente una siesta. Y supongo también que para mí debería ser así, aunque ni va a serlo ni quiero que lo sea. No puedo celebrar nada, tampoco me sobran los motivos para quejarme. No hay tarta, pero si cumpleaños. Podría explayarme con todos los motivos que me llevan a nombrarle aquí, día tras día, o bueno, los lunes, miércoles y viernes de las terceras semanas de cada mes, incluyendo santos y veintinueves de febrero, pero creo que sería hacerme más cansina y repetitiva de lo que ya soy. Así que como él no lo va a leer, y ella no se lo va a contar. Felicidades pequeño.
lunes, 20 de septiembre de 2010
Written in the stars
miércoles, 15 de septiembre de 2010
Paper bags and plastic hearts
lunes, 13 de septiembre de 2010
And listen to the thunder
No hay nada más tonto que un virus en un tarro
Siempre se ha dicho que lo poco gusta y lo mucho cansa. Pues bien, creo que he pasado el límite de lo poco y me he convertido en un bastante. Bastante pesada. Dunno.
Tengo sueño, los mosquitos me acribillan y quedan todavía cuatro eternos días para poder dormir más de siete horas. Además, necesito verla, saber que después de mis enormes estúpideces sigue ahí y voy a poder darle el coñazo como a la que más. Necesito viernes. Bueno, necesito muchas cosas, y a muchas personas. Aunque supongo que ya tengo una edad para empezar a aceptar que hay cosas imposibles, días interminables y distancias insalvables.
Ecuaciones que nunca resolveré y sitios que no voy a pisar o al menos no de su mano.
LLamadme supersticiosa pero prefiero llamarlo destino, putada suena muy explícito.
domingo, 12 de septiembre de 2010
The smell of you in every single dream I dream
sábado, 11 de septiembre de 2010
A veces tengo que hacer de tripas corazón, a veces tengo que huir porque no puedo más
Poco es lo que has bebido si te preguntan la mañana siguiente.
Poco es lo que te fijas en el chico de la camiseta blanca, los ojos marrones y la pulsera abrochada en el tercer agujerito.
Y podría seguir poniendo pocos. Es más pensaba hacerlo. Pero no. Y os preguntareis, ¿Por qué? Porque me toca los cojones, poco. Pero me los toca. Venga hombre fiesta.
Abrazo a ella, abrazo a mí.
Iconito a ella, iconito a mí.
Le comes la boca a ella, AH VAYA, A MÍ NO.
Vale, después de mi ataque de psicópata celosa, con dos tíos (y mis respectivas amigas) distintos, vuelvo a mi cauce. Mañana hablamos. Sed felices, que la vida es corta y los accidentes por las escaleras muy peligrosos.
viernes, 10 de septiembre de 2010
La misma ropa de ayer será el pijama de hoy
Esto no es un intento de entrada optimista.
En realidad dudo que exista el optimismo. Inocentes ilusiones. Ilusos. Ya lo dijo Murphy, si algo puede salir mal, saldrá mal.
Algo solo existe si nosotros pensamos que existe. ¿Entonces la realidad es una imaginación?
Primera clase de filosofía. Las cosas van mejor, con mesas a lo física o química, de dos en dos, y aunque la gente ni se menee durante las clases, pero mejor. Por eso soy tan negativa. Puede parecer una chorrada, pero si tú te mentalizas para lo peor, y pasa, de lo malo lo mejor, ya te habías hecho a la idea. Sin embargo, si pasa algo bueno, subidón. Es simple, idiota, pero simple.
Así que, con canciones antiguas he llegado al fin de semana. Lo necesitaba. Levantarse a las seis y media es algo que aún tengo que asimilar.
Un día de estos os pondré alguna de las canciones que marcaron época, nunca viene mal recordar buenos tiempos.
Ah ah ah, apunte informativo y para el resto de la humanidad que no tiene de novio a Adri. A partir de ahora nadie se pone tontuca-perraca. Toash gochas, ¿Queda claro? :)
-Y yo, ¿qué soy para ti?
+¿Tú? La ilusión de por las mañanas y la diversión de por las noches.
jueves, 9 de septiembre de 2010
Ya no duele, porque al fin ya te encontré
miércoles, 8 de septiembre de 2010
Tocarte sin las manos, esconderme sin querer detrás de unos ojos cerrados
Llevo toda la tarde intentando calmarme y sólo he conseguido unas profundas ganas de vomitar.
Me pongo nerviosa y me duele la tripa. Es el ciclo de mi vida. La mayor parte de mis recuerdos están asociados con nervios, buenos y malos, pero siempre he estado atacada. El día de la comunión, la primera y todas y cada una de las veces que me he subido a un escenario para actuar, las madrugadas que he pasado de fiesta, incluso la primera vez que le puse la cam.
No sé que me pasa, pero vivo con el nudo en la garganta. Estoy mandando a la mierda algo que me importa tanto que no se como parar esto.
Os echo tanto de menos.
Necesito tocarte, estar contigo joder, aunque sea oir tu voz. Respira Sara, respira...
domingo, 5 de septiembre de 2010
Ale, buenas noches
Estoy hasta los mismísimos cojones.
Amo a bocachancla y o botón-y-cremallera.
He recibido un sms de parte del novio de mi amiga, porque la susodicha alegaba no tener espacio suficiente para tantos insultos. Te quiero Sara.
Y sí, me gusta, me putee o no. Me gusta. Y si hacer lo que él quiere significa estar feliz, lo voy a hacer. ¿Sabes por qué? Porque como ya estoy cansada de gilipollas a la cara, me he buscado uno bien lejos.
viernes, 3 de septiembre de 2010
Ese silencio que me desvive, me dice cosas que son tan claras
Todos los que pasamos desde el antiguo coincidimos en que es claustrofóbico. Rejas, rejas, rejas y verde. ¿Verde? ¿Pero como pueden pintar de verde? Vale que en Cristo Rey siempre ha habido cosas verdes. Canastas verdes, árboles verdes, manzanas verdes. El tipo de verde que te hace sentirte como en casa. Verde acogedor, verde humano, verde cielo. Pero no este verde. Acojona. Es como si entras a un hospital y ves las paredes pintadas de verde pistacho. Cosa mala.
Aparte, mis libros pesan quintales, he perdido historia y he ganado algo conocido como "cmc", que bien podría ser "coñazo, muy coñazo" pero que por desgracia se conoce como ciencias para el mundo contemporáneo. Hasta educación física tiene libro, bueno, apuntes. Aunque todo sea dicho, lo prefiero a dar brincos. Yo con los pies en la tierra, no vaya a ser que me lo crea.
-Pues nada, dos besos, en las mejillas.
+Dejemoslo en la boca, ni para tí ni para mí.
-Mm vale, pero besos inocentes.
+En la boca la verdad que nunca vi inocencia...
-¡Pues te la imaginas!
No sé cómo, pero me ganas día a día. Aunque a veces seas tan borde,en el fondo hace que me encantes todavía más.
jueves, 2 de septiembre de 2010
I can't stop missing you
Ella guardaba muchos de los que recibía. Jamás los transcribía, jamás los pasaba a otros formatos. Creía que entonces perdían su magia.
Guardaba mensajes de más de diez años de antigüedad. Me decía que en ellos había dolor extremo, pasión sincera y puro sexo.
Los sms, según ella, eran el acrónimo de "sexo más sexo". Me contaba que todo el mundo tenía guardado en su móvil algún mensaje sexual.
Y que a veces sólo la persona que lo había recibido sabía que lo era; cualquier otro que lo leyese no lo descubriría. Ya que para ello debías conocer la hora a la que lo había recibido, el hecho que se había producido anteriormente y su intensidad.
Ella decía que los mensajes fantásticos eran el epílogo perfecto a una gran quedada. Cuántas veces sabes que tras una buena cita o quedada, al marcharte, a los pocos minutos de separarte de la otra persona recibirás un sms confirmando tu percepción de los momentos compartidos. A veces es más importante el mensaje que la propia quedada.
Yo también guardaba un mensaje en mi móvil desde hace tiempo, uno muy sexual, de esos que, como decía mi madre, nadie se lo imaginaría. Tan sólo decía "¿Vienes?"
Pues eso, que me basta con un sms para alegrarme la tarde, y más si es tuyo. Enserio, de lo tonto que eres me encantas.